En el número d'aquest mes de novembre de la revista Vinos y Restaurantes abordo la polèmica qüestió dels boicots al cava amb l'ànim de fer veure que barrejar vi i política no és cap bon negoci. Què en penseu vosaltres?
Esquivando boicots
RAMON FRANCÀS
El sector del cava catalán vuelve a estar muy agitado tras una cosecha con cerca del 30% menos de producción como consecuencia de una severa sequía (Freixenet, el principal elaborador de cava, habla de un 30% menos de producción mientras el Consejo Regulador del Cava ha rebajado esa cifra hasta el 17%). Pero lo que más quita el sueño a los cavistas catalanes son las posibles consecuencias que puedan provocar sobre las ventas en plena campaña navideña la crisis económica y las polémicas y posibles boicots alentados por las ansias soberanistas catalanas. El director de comunicación de Freixenet, Pere Bonet, ha esquivado en varias ocasiones ante la prensa especular sobre las posibles consecuencias que en la venta de sus cavas puedan tener los movimientos independentistas, pero ha llegado a manifestar que "cada cual consuma y vote lo que quiera". Se ha mostrado más preocupado, eso sí, por la incidencia de la crisis en la venta: "no es de extrañar con tanto recorte de paga extra". El director de comunicación de Freixenet no tiene dudas de que “el ambiente psicológico” creado a raíz de la severa crisis económica no augura alegrías consumistas. Bonet no sabe predecir, sin embargo, si habrá o no boicot, “pero no debemos preocuparnos; nuestra obligación es hacer el mejor cava y ponerlo a disposición de todos los consumidores, en España y en los países de todo el mundo donde estamos". También ha apuntado, paralelamente, que, pese a las importantes dificultades que afronta su compañía a causa la recesión económica, desde que se inició la crisis en 2008 “no hemos echado ni a un solo trabajador ni hemos dejado de comprar ni un solo kilo de uva”. Anteriormente Pere Bonet, al presentar la participativa campaña para realizar el spot televisivo de su campaña navideña de este año, ya había manifestado a los periodistas, al ser preguntado por las consecuencias que podría tener el proceso soberanista en Catalunya, que “en Freixenet lo que hacemos es cava, muy bien hecho, el mejor, y lo ponemos a disposición de los consumidores de 145 países, intentando que satisfaga a todos y, eso sí, intentamos cobrarlo". Añadió que "el resto es algo que no depende de nosotros". Muchos otros empresarios del sector prefieren no hablar ni que se hable del tema, pese a no dejar de mostrarse muy preocupados. Incluso el presidente de Torres, Miguel A. Torres, compañía que por ahora no comercializa cava, ha reconocido que han sufrido una ligera repercusión sobre sus ventas a raíz de los movimientos independentistas en Catalunya, aunque asegura que la incidencia está siendo poco significativa.
Sea como fuere, poco ayuda a serenar los ánimos declaraciones como las realizadas por el presidente de Planeta, José Manuel Lara, afirmando que si Catalunya acaba por independizarse su grupo editorial trasladaría su sede social a otra ciudad de España. Lara acompaño estas declaraciones con la afirmación de que “en una guerra del cava habrá muertos y heridos graves”. Por su parte, en un artículo firmado por Rafael Halcón en Republica.com se asegura que “entre unos y otros y en medio de la preocupación general, estamos llegando en el caso del independentismo catalán al umbral de un enfrentamiento aunque solo sea comercial, la “II Guerra del Cava”.
Tampoco atemperan los ánimos noticias como las que se han hecho eco que el sector del cava extremeño prevé una subida en sus ventas durante la Navidad de este año debido al rechazo que en algunos ciudadanos pueden causar las reivindicaciones soberanistas de Catalunya. Así lo reconoció en declaraciones a la agencia EFE el gerente de Bodegas Romale de Almendralejo (Badajoz), Diego Nieto. No tiene dudas Romale que este año "aumentarán seguramente las ventas por este motivo", e incluso ha expresado que en igualdad de precios, el cliente nacional prefiere un cava extremeño al catalán". Por su parte, el vicepresidente de Apag-Extremadura Asaja, Félix Corbacho, también es de la opinión que la situación de Catalunya provoca que siempre “vaya a haber españoles de fuera de esa comunidad que decidan no consumir sus productos, o al menos hacerlo lo menos posible". El propietario de Bodegas Vía de la Plata, Aniceto Mesías, también ha expresado a EFE que le "gustaría" que el cava extremeño fuera valorado "no por boicots, que no me parecen correctos", sino porque es un artículo "cercano" y "de calidad", y que en su caso está “entre los 15 primeros cavas de España". En Bodegas Vía de la Plata, de Almendralejo, se elaboró la primera botella de cava extremeño.
Antonio Jiménez, presentador del programa líder de audiencia en Intereconomía Televisión, ‘El Gato al Agua’, finalizó la tertulia política el 8 de octubre pasado con un brindis con cava catalán para expresar su rechazo ante la amenaza de un nuevo boicot a los productos catalanes." Nada más oportuno que brindar con lo que más simboliza a Cataluña, el cava, para decir que estamos con todos los catalanes en general, y con aquellos que se sienten españoles, más todavía, apoyándoles y queriéndoles", dijo Antonio Jiménez Y añadió que “tomaremos mucho cava este año”. Alicia Sánchez Camacho, tertuliana habitual de este programa y presidenta del PP catalán, felicitó esta iniciativa y dijo que “traslada lo que es esta casa, donde se produce la libertad de expresión y de opinión. Nada más oportuno que brindar por la convivencia de todos los catalanes, piensen lo que piensen". Entre los muchos comentarios que ha provocado esta entrada en el portal de Intrereconomía incluso hay voces que critican el gesto de Intereconomía. Se llega a decir: "centraros y seguir defendiendo la unidad de España. Y eso pasa por devolverles la patata. Ellos recomiendan comprar solo productos catalanas, hagamos lo mismo".
Los anteriores boicots al cava se han recogido, incluso, en la popular enciclopedia libre Wikipedia, concretamente en la entrada que hace referencia al “anticatalanismo o catalanofobia”. En esta entrada se afirma que “en el resto de España, también ha habido episodios de anticatalanismo, que se han manifestado en acciones como campañas de boicot a algunos productos catalanes, siendo el boicot al cava catalán el que históricamente más atención mediática ha recibido”
Los anteriores boicots ya hicieron mella. De hecho, en el 2010 el sector del cava aún no se había recuperado la cifra récord de 101,3 millones de botellas vendidas en el 2006 en el mercado interior. Con el primer boicot de 2005, las ventas en el mercado nacional retrocedieron aquel año un 6,59%, situándose el número de botellas vendidas en 93,5 millones de botellas, según datos del Consejo Regulador del Cava. Pese a ello, el año pasado, sin boicots explícitos pero en plena crisis, las cifras de venta de cava en España fueron las más flojas desde 1995. En 2011 solo se vendieron 87,3 millones de botellas de cava en el mercado interior. Sin duda alguna, pues, el gran tirón de la exportación continúa siendo la gran baza del cava. El cava pierde gas y ni siquiera el gran comportamiento de las ventas en los mercados internacionales, que superaron el año pasado la cifra récord de 150 millones de botellas, permitieron al sector presentar un saldo positivo respecto al 2010. Las exportaciones crecieron un 2,07% pero la caída en el mercado interior fue notable: -8, 71%.
Muchos creemos que a nadie le amarga un dulce y que el cava es un gran producto universal, un vino espumoso de calidad producido en una región determinada supraautonómica. Es un burbujeante vino de gran relación calidad-precio del que en el último año consiguieron venderse 239,5 millones de botellas en todo el mundo. El sector del cava vendió un total de 152,2 millones de botellas en el mercado exterior en 2011, lo que supone un récord de ventas en la historia de este vino espumoso a nivel internacional. Es el vino español más vendido en el planeta y debería aislarse de estériles polémicas políticas.
El sector del cava catalán vuelve a estar muy agitado tras una cosecha con cerca del 30% menos de producción como consecuencia de una severa sequía (Freixenet, el principal elaborador de cava, habla de un 30% menos de producción mientras el Consejo Regulador del Cava ha rebajado esa cifra hasta el 17%). Pero lo que más quita el sueño a los cavistas catalanes son las posibles consecuencias que puedan provocar sobre las ventas en plena campaña navideña la crisis económica y las polémicas y posibles boicots alentados por las ansias soberanistas catalanas. El director de comunicación de Freixenet, Pere Bonet, ha esquivado en varias ocasiones ante la prensa especular sobre las posibles consecuencias que en la venta de sus cavas puedan tener los movimientos independentistas, pero ha llegado a manifestar que "cada cual consuma y vote lo que quiera". Se ha mostrado más preocupado, eso sí, por la incidencia de la crisis en la venta: "no es de extrañar con tanto recorte de paga extra". El director de comunicación de Freixenet no tiene dudas de que “el ambiente psicológico” creado a raíz de la severa crisis económica no augura alegrías consumistas. Bonet no sabe predecir, sin embargo, si habrá o no boicot, “pero no debemos preocuparnos; nuestra obligación es hacer el mejor cava y ponerlo a disposición de todos los consumidores, en España y en los países de todo el mundo donde estamos". También ha apuntado, paralelamente, que, pese a las importantes dificultades que afronta su compañía a causa la recesión económica, desde que se inició la crisis en 2008 “no hemos echado ni a un solo trabajador ni hemos dejado de comprar ni un solo kilo de uva”. Anteriormente Pere Bonet, al presentar la participativa campaña para realizar el spot televisivo de su campaña navideña de este año, ya había manifestado a los periodistas, al ser preguntado por las consecuencias que podría tener el proceso soberanista en Catalunya, que “en Freixenet lo que hacemos es cava, muy bien hecho, el mejor, y lo ponemos a disposición de los consumidores de 145 países, intentando que satisfaga a todos y, eso sí, intentamos cobrarlo". Añadió que "el resto es algo que no depende de nosotros". Muchos otros empresarios del sector prefieren no hablar ni que se hable del tema, pese a no dejar de mostrarse muy preocupados. Incluso el presidente de Torres, Miguel A. Torres, compañía que por ahora no comercializa cava, ha reconocido que han sufrido una ligera repercusión sobre sus ventas a raíz de los movimientos independentistas en Catalunya, aunque asegura que la incidencia está siendo poco significativa.
Sea como fuere, poco ayuda a serenar los ánimos declaraciones como las realizadas por el presidente de Planeta, José Manuel Lara, afirmando que si Catalunya acaba por independizarse su grupo editorial trasladaría su sede social a otra ciudad de España. Lara acompaño estas declaraciones con la afirmación de que “en una guerra del cava habrá muertos y heridos graves”. Por su parte, en un artículo firmado por Rafael Halcón en Republica.com se asegura que “entre unos y otros y en medio de la preocupación general, estamos llegando en el caso del independentismo catalán al umbral de un enfrentamiento aunque solo sea comercial, la “II Guerra del Cava”.
Tampoco atemperan los ánimos noticias como las que se han hecho eco que el sector del cava extremeño prevé una subida en sus ventas durante la Navidad de este año debido al rechazo que en algunos ciudadanos pueden causar las reivindicaciones soberanistas de Catalunya. Así lo reconoció en declaraciones a la agencia EFE el gerente de Bodegas Romale de Almendralejo (Badajoz), Diego Nieto. No tiene dudas Romale que este año "aumentarán seguramente las ventas por este motivo", e incluso ha expresado que en igualdad de precios, el cliente nacional prefiere un cava extremeño al catalán". Por su parte, el vicepresidente de Apag-Extremadura Asaja, Félix Corbacho, también es de la opinión que la situación de Catalunya provoca que siempre “vaya a haber españoles de fuera de esa comunidad que decidan no consumir sus productos, o al menos hacerlo lo menos posible". El propietario de Bodegas Vía de la Plata, Aniceto Mesías, también ha expresado a EFE que le "gustaría" que el cava extremeño fuera valorado "no por boicots, que no me parecen correctos", sino porque es un artículo "cercano" y "de calidad", y que en su caso está “entre los 15 primeros cavas de España". En Bodegas Vía de la Plata, de Almendralejo, se elaboró la primera botella de cava extremeño.
Antonio Jiménez, presentador del programa líder de audiencia en Intereconomía Televisión, ‘El Gato al Agua’, finalizó la tertulia política el 8 de octubre pasado con un brindis con cava catalán para expresar su rechazo ante la amenaza de un nuevo boicot a los productos catalanes." Nada más oportuno que brindar con lo que más simboliza a Cataluña, el cava, para decir que estamos con todos los catalanes en general, y con aquellos que se sienten españoles, más todavía, apoyándoles y queriéndoles", dijo Antonio Jiménez Y añadió que “tomaremos mucho cava este año”. Alicia Sánchez Camacho, tertuliana habitual de este programa y presidenta del PP catalán, felicitó esta iniciativa y dijo que “traslada lo que es esta casa, donde se produce la libertad de expresión y de opinión. Nada más oportuno que brindar por la convivencia de todos los catalanes, piensen lo que piensen". Entre los muchos comentarios que ha provocado esta entrada en el portal de Intrereconomía incluso hay voces que critican el gesto de Intereconomía. Se llega a decir: "centraros y seguir defendiendo la unidad de España. Y eso pasa por devolverles la patata. Ellos recomiendan comprar solo productos catalanas, hagamos lo mismo".
Los anteriores boicots al cava se han recogido, incluso, en la popular enciclopedia libre Wikipedia, concretamente en la entrada que hace referencia al “anticatalanismo o catalanofobia”. En esta entrada se afirma que “en el resto de España, también ha habido episodios de anticatalanismo, que se han manifestado en acciones como campañas de boicot a algunos productos catalanes, siendo el boicot al cava catalán el que históricamente más atención mediática ha recibido”
Los anteriores boicots ya hicieron mella. De hecho, en el 2010 el sector del cava aún no se había recuperado la cifra récord de 101,3 millones de botellas vendidas en el 2006 en el mercado interior. Con el primer boicot de 2005, las ventas en el mercado nacional retrocedieron aquel año un 6,59%, situándose el número de botellas vendidas en 93,5 millones de botellas, según datos del Consejo Regulador del Cava. Pese a ello, el año pasado, sin boicots explícitos pero en plena crisis, las cifras de venta de cava en España fueron las más flojas desde 1995. En 2011 solo se vendieron 87,3 millones de botellas de cava en el mercado interior. Sin duda alguna, pues, el gran tirón de la exportación continúa siendo la gran baza del cava. El cava pierde gas y ni siquiera el gran comportamiento de las ventas en los mercados internacionales, que superaron el año pasado la cifra récord de 150 millones de botellas, permitieron al sector presentar un saldo positivo respecto al 2010. Las exportaciones crecieron un 2,07% pero la caída en el mercado interior fue notable: -8, 71%.
Muchos creemos que a nadie le amarga un dulce y que el cava es un gran producto universal, un vino espumoso de calidad producido en una región determinada supraautonómica. Es un burbujeante vino de gran relación calidad-precio del que en el último año consiguieron venderse 239,5 millones de botellas en todo el mundo. El sector del cava vendió un total de 152,2 millones de botellas en el mercado exterior en 2011, lo que supone un récord de ventas en la historia de este vino espumoso a nivel internacional. Es el vino español más vendido en el planeta y debería aislarse de estériles polémicas políticas.
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