Ara que ja ha començat la campanya a Catalunya continua el degoteig de noticies sobre el creixement de les vendes dels caves no catalans o de la resta d'escumosos espanyols. Avui ha estat www.elmundo.es (edició Castilla y León) qui s'ha pujat al carro. Què en penseu?
Agroalimentación
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Reacciones
Artur Mas reaviva la demanda de espumoso en Castilla y León
Era un secreto a voces, pues no es la primera vez que ocurre en Castilla y León. El envite independentista del presidente de la Generalidad de Cataluña, Artur Mas, ha vuelto a provocar un incremento de la demanda de muchos otros rincones de España de vinos espumosos elaborados en Castilla y León. Las cerca de 30 bodegas que fabrican esta bebida prevén comercializar 560.000 botellas.
En el fondo se esconde un boicot particular de las familias y
consumidores del resto del país hacia los productos catalanes,
principalmente el cava en Navidad, sobre el que giran todas las
celebraciones del mes de diciembre.
El miedo de los empresarios de la barretina está suficientemente
justificado, a pesar de los intentos de Mas por tranquilizarlos. Sin
embargo, aunque no existen previsiones concretas que apunten a un
derrumbamiento de las ventas de cava en el resto de España, los
propietarios de las bodegas conocen, por experiencia propia, que los
resultados pueden ser nefastos.
Como ya ocurriera en 2006, cuando Josep Lluis Carod Rovira apostó
contra la candidatura olímpica de Madrid 2012, lo que motivó el
posterior boicot a los productos catalanes, los bodegueros que elaboran
vino espumoso en Castilla y León se encuentran al quite de la situación y
muy al tanto de la misma. Todos coinciden en una cuestión importante.
Al igual que hace seis años, ahora Artur Mas hace la mejor publicidad gratuita que alguien puede hacer por los caldos de esta tierra, que ya han recibido solicitudes de demanda, sobre todo de Madrid, para que sus vinos espumosos reinen en las mesas navideñas.
Bodega vallisoletana. | Ical
Por ello, las perspectivas son esperanzadoras en Castilla y León,
pese a que la producción es menor que hace seis años, cuando se
alcanzaron las 850.000 botellas. Por zonas geográficas, la Denominación
de Origen Rueda es la mayor productora, particularmente el 'Palacio de
Bornos' que comercializa Bodega de Sarría, que alcanza
las 150.000 botellas con sus cuatro tipos de espumoso y que fueron los
primeros en elaborar este 'cava' en Castilla y León, tal y como se
publicitaba hace muchos años. Su director comercial, Javier Ayala,
recuerda que todo comenzó en 1978. Tanto ha pasado y tan poco se hacía
que al principio se etiquetaba de forma manual.
La "reticencia del consumidor"
Durante el año, las mayores solicitudes de compra llegan desde Galicia, País Vasco, Navarra y Andalucía,
cuestión a la que se han añadido otras zonas de España debido "a la
reticencia que el consumidor tiene a adquirir el cava catalán", y que ha
provocado una mayor demanda, cuestión que la bodega puede soportar,
dado que elaboran espumosos de hasta con tres años, debido a la
fermentación necesaria.
Las ganas de independencia de Artus Mas también son observadas en el Grupo Yllera,
donde comercializarán un poco más de las habituales 50.000 botellas
anuales de su marca 'Cantosán'. Esta cifra dista mucho de las 12.000 que
sacaron al mercado en 1990, cuando comenzó esta aventura del espumoso
en la bodega, y también está muy alejada de las 80.000 de 1998, justo
cuando las instalaciones sufrieron el famoso incendio. El gerente de la
bodega, Carlos Yllera, avanza que en las próximas semanas se comenzará a
notar bastante el aumento de las compras.
La misma cantidad de botellas comercializa la Cooperativa Agrícola Castellana,
con su vino 'Cuatro Rayas', que planteará una estrategia diferente para
esta campaña navideña por la posible repercusión del anhelo de Mas,
como aseguró su responsable de comunicación, Ana del Fraile, con grandes
expectativas que se cumplirán con sus clientes con producción
suficiente.
El resto de las bodegas elaboradoras de espumosos en Rueda también
están pendientes de la iniciativa independentista del presidente de CiU y
están preparadas ante el incremento de la demanda. Hasta 15.000 prevé
sacar Mocén, con el 'AÑ'; 13.000, Félix Lorenzo Cachazo,
con su Carrasviñas, que espera que se repita las ventas del año en que
Carod Rovira convirtió a estas bodegas en protagonistas; y otras de
menor producción, como Bodegas Félix Sanz (4.000 botellas), que destaca sus grandes demandas de Madrid; Ángel Lorenzo Cachazo (5.000 botellas); Bodegas Vicente Sanz (5.000),
que recuerda con satisfacción su primer año de salida al mercado, que
coincidió con el boicot a los productos catalanes y del que se salieron
beneficiados.
Espumosos de Ribera
Aunque el mayor conocimiento nacional e internacional de la Ribera del Duero se
relaciona con los vinos tintos, tampoco se quedan atrás algunos de los
espumosos que allí se elaboran. En este sentido, destaca la producción
de Bodegas Peñalba López, con la marca del mismo nombre
y su afamada finca Torremilanos, y que alcanza las 100.000 botellas
anuales, con una tendencia en positivo desde principios de los años 80
en que comenzó la comercialización.
Es la única bodega de Castilla y León amparada por el Consejo
Regulador del Cava. La práctica totalidad de la producción se exporta a
Estados Unidos, México y los países del norte de Europa. Fuentes de la
empresa reconocen que el deseo independentista catalán no les
repercutirá "porque las botellas las tienen vendidas igualmente".
El Grupo Matarromera, con tres referencias de
espumoso llamadas 'Emina', saca al mercado una media de 30.000 botellas
anuales desde el año 2009, motivo por el que ha preparado un mayor
número de lotes para esta campaña por si la demanda crece en las
próximas semanas. Mientras, Arzuaga, con su 'Txapana',
vende en torno a 3.500. Su enólogo, Jorge Monzón, concreta que de ellas,
2.500 se corresponden con un blanco que mezcla al 50 por ciento las
variedades Pinot Noir y Chadornay, mientras que las otras 1.000 botellas
son de rosado. Todas ellas se venden a Rusia, principalmente a familias
de un alto poder adquisitivo.
Varias son las bodegas que elaboran espumoso en el Bierzo, aunque una sobresale por encima de todos. La conocida Prada a Tope (Canedo),
con su Xamprada, comercializa de forma anual unas 25.000 botellas
(80.000 en 2006), una cantidad que no obstante representa un gran
crecimiento desde que comenzara esta particular andadura allá por 1992
debido a su progresión al alza, tal y como destaca su enólogo, José
Manuel Ferreira. Este año se hacen dos tipos de espumoso. Por un lado,
blanco, para el que utilizan las variedades Godello y Chadornay, y por
otro, rosado, con Mencía y Godello. Nueve de cada diez botellas se queda
en el mercado nacional, mientras que el resto se dirige principalmente a
Suiza, México y Japón.
Bierzo y Toro
Viñas del Bierzo, con su Ardayel y desde
Camponaraya, lanza unas 6.000 botellas, aunque cuando comenzaron hace
seis años con este tipo de vino la cantidad era la tercera parte.
Fuentes de la bodega reconocen que un buen cliente que tienen desde hace
tiempo en Cataluña les permite comercializar allí y en Ibiza una gran
parte de la producción, lo que contrasta bastante, ya que son ventas en
casa del 'enemigo'. "Nosotros estamos encantados de que los políticos de
allí saquen la lengua a pasear", comentan desde esta comarca leonesa, y
no obvian que, por ejemplo, el año pasado "se notó la bajada de
adquisiciones porque estuvieron calladitos".
Similar cantidad pone a la venta Vinos del Bierzo,
en Cacabelos, con 5.000 botellas de Don Perejón, una cifra que se ha
mantenido estable en los últimos años, al contrario que Godelia, cuya
producción es más irregular y este año solo prevé 400 unidades que se
destinan al mercado más local, es decir, a la propia comarca berciana.
En Toro, Bodegas Fariña elabora
desde 2005 en torno a 6.000 botellas, una cantidad que este año se verá
beneficiada por el envite indendentista catalán. Se trata del mismo
número que Liberalia Enológica. Su propietario, Juan
Antonio Fernández, explicó a Ical que la situación ha cambiado mucho
desde 2006, cuando empezaron con el espumoso y con solo 2.000 botellas y
cree que las palabras de Artur Mas permitirán un beneficio para la
empresa, dado que el 80% de la producción de este tipo de vino (90%
verdejo de Zamora y 10% Moscatel) se queda en España.
Menos saca a la venta Viñaguareña, con 1.500
botellas, lo cual no impide su éxito en el mercado. Roberto Zárate, el
enólogo, destaca que se elabora con verdejo de viñas centenarias y que,
aunque no está amparado por la DO, pues está considerado como vino de
mesa, son capaces de exportar más de la mitad, casi todo dirigido a
China. Admite que de momento no han notado repercusión por el envite
catalán.
En el caso de Cigales, únicamente existe la constancia de que Bodegas Santa Rufina,
en Cubillas de Santa Marta (Valladolid), elabore vino espumoso. Este
año alcanzarán las 5.000 botellas de su marca Bosque Real Brut Nature
Blanco, una cantidad que representa un récord en la casa tras una
tendencia en positivo desde 2008, año del primer lanzamiento, con 1.500
botellas.
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