Torres prescindeix de Raül Bobet per "incompatibilitats"

Aquest dissabte publico a La Vanguardia (Economia) una informació que ha sacsejat Torres i el món del vi. El president de la companyia ha decidit prescindir de Raül Bobet. No ha arribat a ocupar ni dos anys el càrrec de director general adjunt a la presidència. Tot plegat, en ple procès successori. Molts encara recorden que Raül Bobet ja es va desvincular de Torres després d'haver-ne estat el director tècnic abans que Mireia Torres.

Torres remodela la dirección y prepara la sucesión

RAMON FRANCÀS

Vilafranca del Penedès

A causa de una supuesta pérdida de confianza por “incompatibilidades”, el presidente y consejero delegado de Torres, Miguel A. Torres, ha decidido prescindir del que hasta ahora era su mano derecha, Raül Bobet. Tras revelarse que el único hijo varón del presidente, Miquel Torres Maczassek, regresará a España a finales de año tras dirigir durante los últimos tres años la filial chilena del grupo, el presidente ha decidido remodelar nuevamente la cúpula directiva en pleno proceso sucesorio. A principios de 2013 se convertirá, a los 71 años, en el presidente de honor tras escogerse al nuevo primer ejecutivo de la compañía. La decisión, asegura, no está tomada. Serán los accionistas familiares quienes decidirán el futuro presidente ejecutivo de la compañía. Miguel A. Torres no esconde que una de sus principales preocupaciones es conseguir una buena transición hacia la próxima generación familiar, la quinta. El proceso de sucesión está siendo tutelado con un protocolo familiar desarrollado bajo los consejos de la consultora Lansberg Gersick & Associates, especializada en empresas familiares.

            El enólogo Bobet se incorporó en mayo del 2010 como director general adjunto a la presidencia de Torres compartiendo el cargo con el de copropietario de la bodega Ferrer-Bobet del Priorat y con la copropiedad de su proyecto más personal, el de Castell d’Encús de Costers del Segre. La marcha de Bobet llega tras la substitución en febrero pasado de Toni Solé por Josep Batet Rovirosa, el hasta entonces director de desarrollo de negocio, al frente de la dirección de recursos humanos. Solé había sido fichado por Torres procedente de la compañía Vueling Airlines. La remodelaciión más destacada ha pasado por forzar a la hija del presidente, Mireia Torres Maczassek, a dejar la dirección técnica para hacerse cargo de Jean Leon (Penedès) y de la bodega de Torres en El Lloar (Priorat). Mireia fue substituida como directora técnica por el enólogo externo a la familia Josep Sabarich. Por su parte, el cargo de director de marketing que quedó vacante con la marcha de Miquel Torres Maczassek a la bodega chilena de Curicó fue cubierto con el fichaje de Joaquim Tosas, que procedía de Danone. En los últimos meses también se ha rectificado al frente del departamento de recursos humanos y comunicación, situando al holandés Cristoph Kamüller en los mercados internacionales y devolviendo el cargo en España a Vinyet Almirall. Anteriormente se había prescindido de otros directivos de dilatada trayectoria en Torres, como el abogado Luis de Javier. Las remodelaciones se han sucedido desde la llegada a la dirección general de Raül Bobet.

            El Grupo Torres cerró el último ejercicio con una facturación de 215 millones de euros, lo que suposo un crecimiento del 4,9% respecto al año anterior. Buena parte del crecimiento experimentado por Torres se debe nuevamente al mercado exterior, que sigue siendo el 72% de su actividad. Venden sus vinos y brandies a 140 países de todo el mundo.