Moritz ha inaugurat avui a Barcelona una destacada plataforma gastronòmica, cultural i d'oci després de recuperar el seu patrimoni industrial (les imatges són de Pierre Clémençon i Albert Marin):
Cerveses Moritz abre a la ciudad las puertas de la Fàbrica Moritz Barcelona
El proyecto, de 4.500 m2, será una gran plataforma de gastronomía, cultura y ocio abierta a Barcelona
Jean Nouvel ha sido el encargado de la rehabilitación y diseño del complejo arquitectónico
Barcelona, 29 de novembre del 2011.- Cerveses Moritz ha presentado esta mañana el proyecto más emblemático de su historia reciente: la Fàbrica Moritz Barcelona (FMB), que representa la recuperación para la ciudad de los espacios Industriales y fabriles que fueron la sede de su empresa desde 1856.
La presentación ha contado con la presencia de Jean Nouvel, arquitecto artífice de la rehabilitación y diseño del proyecto; Jordi Vilà, director gastronómico de los espacios de la Fàbrica Moritz Barcelona y Albert Castellón, director general de Moritz.
Según declaraciones de Albert Castellón, “este proyecto supone una de las hazañas principales para la compañía, dado que será la plataforma dónde Moritz comunicará sus valores y su savoir faire en el día a día”. Será, además, la plataforma a partir de la que ser “la cerveza de Barcelona” deje de ser una declaración retórica para convertirse en una realidad trabajada por muchos proyectos y actos culturales, ciudadanos y participativos que justificarán esta afirmación por la vía de los hechos, no de las palabras.
Y es que la Fàbrica Moritz Barcelona será un espacio único, dividido en tres plantas, que acogerá todo tipo de actividades alrededor de la gastronomía, las nuevas tendencias, la moda, la arquitectura, el diseño, la emprendeduría y más. El espacio incluirá una cervecería, dos restaurantes, un bar à vins, una tienda, una microcervecería, un museo, un aula gastronómica y diversos espacios polivalentes dónde se realizarán tanto actividades propias de la marca como actividades que actualmente tienen lugar en la ciudad.
Gastronomía: el gran pilar del proyecto
Uno de los puntos fuertes de todo el proyecto es la vertiente gastronómica, dónde el galardonado chef, Jordi Vilà, será el encargado de dirigir todos los espacios culinarios. Por un lado, ha diseñado la carta de la “Cervecería Moritz” (situada a pie de calle) y en la que se podrá encontrar una oferta que combina platos con raíces catalanas y platos típicos alsacianos, como el Flammkuchen. Bajo el paraguas conceptual de una “cervecería contemporánea” la oferta y la puesta en escena de la Cervecería Moritz bebe y se inspira de diversas influencias nacionales e internacionales. Fritos a la andaluza, marisco a la gallega, charcutería a la alemana, cocottes a la francesa, propuestas horneadas de todo tipo y la reedición de grandes platos típicamente cerveceros se unen para configurar una propuesta única en la ciudad de Barcelona. Cabe destacar que esta cervecería cuenta con la barra de estaño más larga de la ciudad con más de 25 metros y una capacidad en barra y mesas de 250 personas.
“Estoy muy contento y orgulloso de poder dirigir esta nueva etapa que me ha encargado la familia Moritz. Participar de forma activa en la definición y ejecución de la parte hostelera y gastronómica de la Fàbrica Moritz Barcelona son dos retos que marcan una importante hazaña en mi carrera y permitirán desplegar todo nuestro potencial gastronómico”, afirma Jordi Vilà.
La estrella indiscutible, sin embargo, será la cerveza: una cerveza elaborada diariamente y a la vista de los consumidores, que podrán compartir la experiencia de la fabricación y la degustación in situ como nunca antes se ha podido hacer en la ciudad de Barcelona. La microcervecería de la Fàbrica Moritz Barcelona producirá centenares de miles de litros de cerveza fresca sin pasterizar en diversas versiones que incluyen la Mortiz Pilsen, la Moritz Epidor – una strong lager – y otras versiones mucho más especiales y de edición limitada que aparecerán y desaparecerán en función de la temporada y los cambios estacionales. Dentro de éstas, podremos encontrar la Moritz Pilsen “sin filtrar”, una cerveza con levaduras en suspensión que maximiza la potenciación de los componentes aromáticos de la cerveza fresca.
Cerveza fresca, sin pasteurizar
Toda la cerveza fresca que se consuma en la FMB será producida en la “Microcervecería”, una de las más grandes que existen y preparada para producir 6.000 Hl anuales.
La fórmula y la receta para la elaboración de la cerveza es la misma que la Moritz que se comercializa actualmente: sin enzimas ni aditivos, sólo con lúpulo, agua, malta y cebada, siguiendo la ley de pureza alemana. Cabe destacar que el agua que se utilizará para la elaboración en la microcervecería, se transporta regularmente desde el Montseny, y se almacena en unos tanques de acero inoxidable ubicados en la misma FMB. El origen del agua es especialmente relevante porque refuerza una realidad poco conocida de la cerveza Moritz convencional: la utilización exclusiva de agua mineral natural Font d’Or, de la empresa Vichy Catalán. Por otro lado, hay que destacar también que el proceso productivo que se reproducirá fielmente en la cervecería tiene un aire más artesanal que industrial. La sala de tanques, dónde se almacena esta agua, permitirá celebrar eventos sociales de todo tipo, bajo la particular mirada de dos grandes máquinas antiguas recuperadas y restauradas que, recuperando el movimiento y el funcionamiento original, permitirá descubrir cómo se envasaba i se etiquetaba la Moritz hace más de 60 años.
La moda y el diseño siempre presentes: M-Store
La Fàbrica Moritz Barcelona también contará con la “M-Store” una tienda del estilo “concept Store” donde se encontrarán artículos de ámbitos muy distintos vinculados a la galaxia de significados Moritz. El diseño, la moda, la tendencia, la creatividad, la gastronomía y la producción editorial de calidad, configuran las categorías de productos que se podrán encontrar en la M-Store. Productos de colección como las Moritz by Munich o la colaboración con la marca londinense de bicicletas Brompton, lanzando el proyecto “Urban Picnic BCN”, dan pistas de los biorritmos que marcarán la M-Store. Ésta, además, cuenta con la inspiración de Chu Uroz, reconocido personaje del mundo de la moda, el diseño y las tendencias que actúa como “concept designer” de la tienda y como comisario de los contenidos de la misma.
La distribución de la tienda cuenta con dos espacios singulares. Por un lado, la zona dónde se podrá encontrar artículos que transmiten la experiencia Moritz, además de otros productos más convencionales que conforman el catálogo de merchandising de la marca.
La segunda parte de la tienda contiene una zona más daily, dónde el protagonista es un horno de pan que, bajo el partenariado con la firma Triticum, ofrecerá panes gastronómicos de alta calidad elaborados al momento. Ésta será la primera ocasión en que la prestigiosa empresa de Cabrera de Mar aproxima la cultura del pan al consumidor final, una estrategia que la empresa ha desarrollado hasta ahora exclusivamente en el sector profesional de la restauración. En palabras de Xevi Ramon, propietario de Triticum, “la vinculación con Moritz es una gran oportunidad para demostrar delante de los ojos del gran público lo que significa nuestro producto. Tradición, innovación y transgresión son tres actitudes que Moritz y Triticum compartimos en nuestro ADN y que encajan perfectamente en este proyecto en común”. Cabe destacar que, además de encontrar los productos más exitosos de Triticum, también habrá un pan Moritz dónde, en lugar de trabajar la harina de trigo con agua, se hará con cerveza Moritz y con los mismos granos de cebada malteados que constituyen la receta clásica de la cerveza.
Si el pan es un producto de consumo diario, también lo es la cerveza. En la M-Store será posible comprar cerveza fresca para consumir en casa, a través de un innovador sistema de envasado en botellas de litro que se podrán personalizar a voluntad de los clientes. Esta tienda se completará con una zona de quiosco dónde se podrá encontrar toda la prensa nacional además de una cuidada selección de revistas de tendencia, moda, gastronomía, economía 2.0 y arquitectura más difíciles de encontrar en la ciudad.
Moritz Bar à vins
En la misma planta, y funcionando como anexo a la cervecería, también se podrá encontrar una zona de vinos de alta calidad dónde la característica principal será el consumo de vino al peso. El consumidor, asesorado por un experto de la Asociación Catalana de Sumillers, podrá escoger entre diversos vinos de los Países Catalanes o de otros países en función de lo que esté dispuesto a pagar. El Moritz Bar à Vins, quiere revolucionar la manera de aproximar los vinos de alta expresión y precio al gran público, democratizando su degustación mediante una tecnología desarrollada por el equipo de ingenieros de la marca catalana. A partir de ésta, y de la utilización de un sistema de conservación basado en gas argón, será posible servir vinos en copas y/o por gramos de manera que el precio no sea una barrear infranqueable para atreverse a probar y descubrir grandes vinos. Dentro de la selección de cerca de 400 referencias de vinos negros, blancos, rosados, cavas y dulces, destacarán los vinos de los Países Catalanes y aquellos de otras partes del mundo que hayan sido seleccionados por los mejores sumillers de Cataluña. Tampoco podrán faltar, para remarcar el origen alsaciano de la familia Moritz, los famosos vinos blancos alsacianos de la zona del Rin, unos vinos que maridarán de forma especial con la gastronomía catalano-alsaciana que caracterizará la Cervecería Moritz y el Restaurante Louis Moritz.
Sala 39: espacio arquitectónico con uso lúdico y cultural
En la planta del subterráneo, la Fàbrica Moritz Barcelona contará con una sala polivalente preparada para alojar eventos culturales de todo tipo como exposiciones, showrooms, conciertos, programas de radio y tv, presentaciones etc. Lo que en su día fueron los espacios que albergaban las antiguas bodegas de fermentación desde el siglo XIX, han estado rediseñados para funcionar como una sala para celebrar eventos singulares y únicos. Es por ello que cabe destacar que en medio de la sala habrá una plataforma circular hidráulica de 4x4 metros que permite configurarse de forma automática en diferentes posiciones. De esta forma es posible plantear el espacio, en pocos segundos, en sala de presentaciones, set de entrevistas, plató de televisión, escenario para actuaciones y, de la manera más singular posible, en barra de bar a cuatro vientos para celebrar fiestas.
En esta gran sala, además de la celebración de eventos de todo tipo, la gastronomía también jugará su papel: Moritz, de la mano, de nuevo de Jordi Vilà, ha preparado una línea de catering que permitirá escoger la propuesta más adecuada dentro de su extenso catálogo y que darán pie a celebración de cócteles, snacks y fiestas.
Brasserie Louis Moritz
En el subterráneo de la FMB, al lado de la Sala 39 y compartiendo espacios con las salas de fermentación de la Microcervecería, se situará el restaurante “Brasserie Louis Moritz”. La conjunción de la mejor cocina catalana con la excelencia histórica de la gran cocina francesa, será una realidad del restaurante, dónde la puesta en escena, además de la gastronomía, serán sus principales ejes de diferenciación. Un restaurante popular que aproximará y democratizará la gran cocina a la ciudadanía.
Un espacio conectado a la más alta velocidad
La Fábrica Moritz Barcelona será el primer gran espacio en Barcelona en ofrecer gratuitamente una conexión de 100Mb reales gracias a la fibra óptica de última generación de ONO, con quien la cervecera ha firmado un acuerdo de colaboración.
Es voluntad de las dos empresas que el ciudadano de Barcelona disfrute gratuitamente de la conexión a internet más rápida que se puede encontrar en la actualidad, con el objetivo de convertir la Fàbrica Moritz Barcelona en un punto de encuentro para todos aquellos que quieran vivir la experiencia de navegar por internet de la forma más rápida posible, sin restricciones y con toda libertad. La colaboración con ONO no se limita a la conectividad y se amplía también a la oferta de entretenimiento a través de la televisión digital TiVo que permitirá ofrecer gratuitamente, entre otros contenidos, partidos de fútbol en HD real en las grandes pantallas de proyección que se encuentran repartidas por la Fàbrica.
La colaboración entre las dos marcas hará también posible la celebración de encuentros y campeonatos internacionales de gamers así como la presentación de nuevos videojuegos que vayan apareciendo en el mercado.
Proyectos inminentes
En los próximos meses del 2010 se dará apertura al Museo Moritz, al restaurante atelier, al aula gastronómica y al Moritz Think Tank, un lugar de encuentro para emprendedores, un punto dónde las ideas y los negocios puedan confluir para crear proyectos sólidos e innovadores. Cada proyecto, en construcción en el principal de las tres fincas, tendrá su propia personalidad y permitirá explotar de una forma definitiva esta plataforma de la marca Moritz Barcelona.
Jean Nouvel: tradición y modernidad
Moritz se pone en manos de Jean Nouvel para rehabilitar el espacio más importante de su historia. Y lo hace de la mano del prestigioso arquitecto que conjuga la modernidad y el estilo con la moderación que ha supuesto trabajar sobre unas paredes de más de 150 años de vida. Y es que los tres edificios de la Ronda Sant Antoni, exponentes de la arquitectura Barcelona de finales del siglo XIX y principios del XX, se transforman para convertirse en una plataforma de ocio, restauración y cultura para la ciudad.
El proyecto conserva importantes vestigios de la antigua fábrica como tanques de hormigón armado fabricados en los años 20, pasillos de trabajo o bodegas abovedadas, únicas en Barcelona. Todo combinado con la modernidad de Jean Nouvel y su juego de luces y cálidos colores.
El conjunto arquitectónico trata de desvelar la belleza de la arquitectura industrial de la Barcelona del siglo XIX, profundizando en el ladrillo y el acero. El espacio muestra tanques de hormigón, antiguas máquinas vinculadas a la industria cervecera y antiguos montacargas. Por otro lado, el suelo está decorado con mosaicos históricos recubiertos de resina transparente, creando un efecto visual espectacular. Jean Nouvel ha querido ensalzar el contraste y la sobre posición de épocas. Por ello, se encuentran imágenes icónicas de la marca reinterpretadas para iluminar el interior de la Fàbrica Moritz Barcelona. Motivos en blanco y negro, dorados o espumosos, evocan la historia del espacio reflejada en sus paredes. La inmaterialidad de las luces y las imágenes, se superponen a la arquitectura industria. Las barras y mesas son de estaño, de esta forma la consciencia del paso del tiempo quedará grabada a la propia arquitectura del espacio. Es necesario destacar el efecto de las fachadas, donde se pueden encontrar juegos de espejos para incrementar la luminosidad interior. La naturaleza también tiene un papel importante en unos de los espacios exteriores y se material en forma de jardín vertical realizado por Patrick Blanc, donde en su día había un muro de hormigón.
Además de Jean Nouvel, el proyecto cuenta también con otros grandes talentos artísticos. El diseñador America Sanchez, que fue el responsable de adaptar la imagen gráfica de la marca, y Albert Planas, han evolucionado el legendario logotipo de la cerveza Moritz creando uno nuevo especial para la Fábrica Moritz Barcelona. En este proyecto, el protagonista es la jarra, para todo ello que hace referencia a la fábrica. La “M” continuará siendo protagonista en todo aquello referente a producto. El código de colores es amarillo y negro, en lugar de azul y amarillo.
Apertura al público
El próximo domingo 4 de diciembre tendrá lugar el III Aperitivo Popular Moritz, una celebración que servirá en esta ocasión para invitar a todos los ciudadanos a la presentación de la FMB, que abrirá definitivamente sus puertas el 12 de diciembre.
El domingo se podrán degustar en la calle, gratuitamente, las bravas alsacianas, una de las tapas que se encontrará en la Cervecería Moritz. La jornada empezará con la “Moritz Parade”, una actuación artística en la calle dirigida por Antoni Miralda, acompañada de la música de Carles Santos. Posteriormente, desde los balcones de la FMB, tendrá lugar un espectáculo sorprendente para todos los públicos. El Aperitivo, que ya se celebró en los años 2005 y 2006, quiere convertirse un referente popular de nuestra ciudad.