Sus ventas internacionales crecen un 32% en el último ejercicio
Juvé y Camps rejuvenece y se lanza a exportar
RAMON
FRANCÀS
Sant
Sadurní d’Anoia
Juvé y Camps se ha lanzado de forma decidida
a exportar pero “no a cualquier precio”. No han querido entrar en la deriva de
precios a la baja que el cava está experimentando en los mercados de
exportación. La estrategia, según el presidente de la compañía, Joan Juvé Santacana,
no podía dar mejores resultados en tan corto plazo de tiempo. En el último
ejercicio sus ventas internacionales se incrementaron un notabilísimo 32%,
hasta alcanzar las 480.000 botellas (el 15% de su producción total). Estados
Unidos es su principal feudo exterior, seguido de los mercados de Japón, Perú,
Alemania y Noruega. También están dirigiendo muchos esfuerzos para penetrar en
los emergentes mercados BRIC. De todos ellos solo están ausentes en la India.
Hace solo un año que vendieron el primer container en la China (10.000
botellas) y hoy ya cuentan con un misionero en este país. Su estrategia
internacionalizadora les ha permitido paliar, en gran medida, la caída en el
estancado y muy competitivo mercado interior. Joan Juvé reconoce las grandes
dificultades que encuentran en el mercado español y habla de “una batalla
diaria” para mantener las ventas. De hecho, el último ejercicio lo cerraron con
una facturación de 24 millones de euros, entorno a un 2% menos que en 2010. Sin
embargo, la facturación de su distribuidora de vinos y destilados de gama alta
y lujo, Primeras Marcas, que representa en España iconos mundiales cono el mítico
burdeos Pétrus o el champán Roederer y su afamado Cristal, ha pasado de sumar
10 millones de euros de facturación en 2010 a los 10,5 millones del último ejercicio.
Este
año esperan continuar creciendo en los mercados de exportación pero sin
descuidar el mercado catalán y nacional. Para ello, este proyecto familiar que
se remonta a 1796 está apostado por “rejuvener” la imagen de marca aprovechando
la incorporación a la compañía hace solo un año, como adjunta a la presidencia
con especial dedicación a los ámbitos de marketing y comercial, de la hija del
presidente, Meritxell Juvé, de 27 años. Como afirma Joan
Juvé, “se nota la sabia nueva en las cavas”. Sus acciones se encaminan a “remarcar la imagen de calidad y prestigio”
con productos de gama alta con los que consiguen incrementar sus ventas pese al
entorno de recesión. También están sumando a su presencia en establecimientos
más tradicionales la creciente penetración en los restaurantes y locales que
están más de moda. Así, son bien visibles en restaurantes barceloneses como el Tickets
de los hermanos Adrià, Dos Cielos, Bravo, Moments y Moo pero también en destacados
puntos de venta internacionales como Harrods de Londres, Käfer de Munich, Gum de Moscú,
Meidi-ya de Tokio o H. J. Hansen de Copenhague.
Su producción de cava alcanza los
2,9 millones de botellas (un 85% del total) y la de vino tranquilo, que se ha
indo incrementando, ya suma 485.000 botellas. Pese a la crisis, Juvé y Camps
mantiene las inversiones en las bodegas y, sobretodo, en sus jardines de viñas.
Cuentan con 450
hectáreas propias en el Penedès, de las cuales unas 250
se encuentran en producción. Este mismo año han incrementado sus plantaciones
con 6 hectáreas
de muscat y 4 de gewürztraminer, y con uvas de la próxima vendimia elaborarán
un nuevo vino blanco aromático.
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