Nou rumb a Mont Marçal

Mont Marçal ha iniciat un destacat canvi de rumb estratègic. Avui dilluns ho publico a la secció d'Economia de La Vanguardia.

Abandona marcas blancas y proyecta una nueva bodega

Mont Marçal se reinventa

RAMON FRANCÀS

Castellví de la Marca

Cuando en octubre de 2006 Blanca Sancho (45 años) se hizo cargo de las riendas de Mont Marçal, una bodega del Alt Penedès fundada por su padre Manuel en 1975, la compañía se encaminaba a un futuro inmediato incierto. El prestigio de Mont Marçal, que llegó a elaborar más de cinco millones de botellas centrando hasta el 60% de su producción en marcas blancas, estuvo en entredicho. Su plan de choque para virar el rumbo de la empresa se inició tomando una drástica decisión: abandonar la elaboración de vinos y cavas de marca blanca. El 31 de diciembre del 2008 Mont Marçal vendió la última botella de cava a la cadena de distribución británica Sainsbury. Les vendían el cava a un precio insostenible, 1,20 euros por botella. La decisión fue “difícil pero inevitable”, ya que suponía prescindir de golpe de 2 millones de euros de facturación. Se era consciente que continuar vendiendo a Sainsbury era “pan para hoy pero hambre para mañana”. Aunque mantienen el cava que elaboran para Eroski, progresivamente pretenden prescindir de marcas blancas como el cava del Barça, que realizan por encargo de la empresa licenciada Red Dragon Energy Drink. 

Blanca Sancho asegura que “reinventar la marca es más difícil que empezar de cero pero determinación no nos falta, y nos gustan los retos”. Eso sí, se es consciente que “nos costará remontar nuestra imagen de marca”. Su meta es “dar la vuelta” a la empresa con productos de alta relación calidad-precio, vinificar los vinos en una nueva bodega, ganar prestigio y limitar la producción a 3 millones de botellas de vino y cava “bien vendidas y bien cobradas”. Actualmente comercializan 2,8 millones de botellas de cava y 800.000 de vino tranquilo amparado por la DO Penedès. La consejero delegado de Mont Marçal no tiene dudas de que el futuro pasa por apostar más por el cava que por el vino, ya que el espumoso de calidad catalán “tiene menor competencia mundial”.

La gestión de Blanca Sancho ha permitido en “un tiempo récord” recuperar uno de los dos millones de euros que la empresa dejó de ingresar tras no continuar sirviendo sus productos a Sainsbury. Si en el 2008 las ventas alcanzaron los 7 millones de euros, el último año lo cerraron con 6,1 millones. Especialmente remarcables fueron los crecimientos que experimentaron el año pasado, entre un 15 y un 20%, en las tiendas especializadas y hostelería. Para este año esperan incrementar su facturación un 10%. Actualmente exportan el 50% de su producción a un total de 23 países de todo el mundo, principalmente Bélgica, Holanda, Estados Unidos, Dinamarca y el Reino Unido. Este año intentarán desembarcar en Japón, China y Corea. Como punta de lanza de la nueva dinámica iniciada en Mont Marçal Vinícola apostando por la calidad, en octubre presentarán un cava reserva de alta gama del que sólo han elaborado 15.000 botellas. Este elegante nuevo cava es, según Blanca Sancho, “reflejo del cambio, las ganas, la ilusión y el esfuerzo del equipo”. También quiere ser un cava que “sorprenda a nuestros detractores”.